Diario de una Boda: El lugar ideal (I)

Una vez decidido el tipo de ceremonia, tocaba decidir el dónde. Mi Rubio es más de montaña y yo de playa. Tras haber mirado varios lugares cerca de donde vivimos, ninguno despertó en nosotros nada especial,  así que decidimos ampliar horizontes. El primer sitio que vimos que sí «nos dijo algo» fue en Lleida. Era un balneario en plena montaña con unas vistas preciosas, alejado del mundanal ruido. Tenía una zona muy bonita para hacer la ceremonia con unas vistas espectaculares a la montaña en las que se dibujan unas puestas de sol que quitan el hipo. Un amplio salón donde celebrar el banquete y el baile, con grandes ventanales para no perderse detalle de las vistas en ningún momento, que es el punto fuerte del lugar y hay que explotarlo. Al estar lejos de todo, solicitamos la opción con alojamiento para todos los invitados, unas habitaciones preciosas y muy acogedoras, la casa es grande y no repara en gastos, como diría mi abuela. Nos hicieron una oferta más que atractiva incluyendo spa y desayuno para todos los invitados al día siguiente. El menú también estaba muy bien, pica pica abundante, cordero al horno en nido de no se qué, echaba de menos algo de pescado, era un menú carnívoro, será por que el mar les pillaba lejos.
La chica que nos atendió y con la que intercambiamos llamadas y emails durante meses era majísima, tan maja como despistada. La verdad es que fue el primer sitio donde nos visualizamos casándonos.
En la primera visita, vimos todas las instalaciones y estuvimos viendo las diversas opciones, que si música en directo para el baile o dj, que si bocadillitos de recena al finalizar el baile, que si masaje o spa para los invitados, total que escogimos todo lo que nos gustaba y le pedí específicamente que me mandase el presupuesto final con el iva incluido.
La primera sorpresa llegó cuando al recibir el email con el presupuesto había añadido cosas de las que no se había hablado, como las minutas a 2.50€ más iva por persona, cosa que no me había comentado en ningún momento,  no es que eso arruine la boda, pero da rabia, le dijimos que dj, que no íbamos a poner música en directo de un grupo que no habíamos oído nunca y que éramos un poco especiales para la música y va la tía y pone música en directo. Se equivocó en el número de habitaciones y no, no puso los precios con iva. Total que tras 3 presupuestos con errores, le llamé y le dije que había hecho un presupuesto uniendo todo lo que estaba correcto de los que nos había mandado incorrectos y me dice «mándamelo que así lo tengo bien y se lo paso a mi jefe» así que le hice yo a ella el presupuesto y se lo mandé para que diese el visto bueno, supongo que hacerle yo a ella su trabajo fue la gota que colmó el vaso para acabar de desanimarme e ir mirando otros sitios. Ese sitio me gustaba mucho pero fue perdiendo puntos por tantos fallos en la organización del presupuesto, si era así con eso ¿cómo sería el día de la boda? Es una sola vez en la vida y no quiero fallos o por lo menos lo mínimos posibles y lo que se dice confianza ya no me inspiraban en aquel lugar. Así que mi idílica boda campestre ya no se daría, por lo menos allí.  Mi sorpresa fue cuando Mi Rubio también descartó el lugar, ya que como he dicho el es el montañero pero es que estar dos meses detrás de alguien para que acabes haciendo tú su trabajo y más cuando te vas a dejar un dineral en un solo día pues es normal que hasta él se desanimase, así que nos dispusimos a ver más lugares pero ya sí que sí más que decididos a que fuese o playa o montaña, fantaseábamos con la ceremonia a la puesta de sol, rodeados de naturaleza de familia y amigos, haciendo cábalas de nuestro lugar ideal.

Seguiremos informando…

11 comentarios en “Diario de una Boda: El lugar ideal (I)

  1. Reloj de madre

    Odio ese tipo de cosas, es muy frustrante cuando ya te has hecho ilusiones. Espero que ya hayáis encontrado el lugar indicado.

    Un consejo que doy es que ese día disfrutes, no pienses que todo saldrá perfecto y ignora los pequeños fallos. No todo puede salir perfecto y es mejor ir haciendose a la idea para que nada te amargue el día. Yo cometí unos cuantos fallos jejejeje Eso si, puedes prepararlo para que sea perfecto así fallarán menos cosas.

    Un beso!

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    1. Yo Tampoco sabía Autor

      Sé q no saldrá perfecto pero es q fue tan decepcionante la incompetencia de la muchacha q me veía casándome allí y siendo todo desastroso jejeje pase lo q pase sé q será un día maravilloso. Feliz día! Muack!

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  2. Marmes

    Por como lo describes pintaba muy bien el sitio. Pero normal que con tantos errores no confiaras en ellos, es muy fuerte que tuvieras tú que mandarle el presupuesto arreglado!! Que incompetencia!! A ver que decidisteis al final… seguiremos leyendote, jeje,
    Besos

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  3. Una sonrisa para mamá

    Anda que ya les vale, que el cliente acabe haciendo el presupuesto. Ufff, no se… si te hiciese mucha mucha ilusión el sitio podrías pensartelo, pero si no, yo no me arriesgaría porque si ya empieza así… Bueno ya nos contarás más. Bss!

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  4. Anónimo

    Siempre entro en blogs y nunca suelo comentar. He llegado al tuyo a través del de icumas o "una madre molona". Al leer este post, he recordado la ilusión con la que yo hice los preparativos de mi boda y entiendo perfectamente que descartases el sitio… Yo soy mañica y creo que el monasterio de Veruela te puede gustar, el concepto es parecido al que cuentas, montaña y aire puro. Espero que te guste y que aunque no te cases allí, encuentres el lugar ideal para ti. Suerte!!

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Con la ilusión que me hace no puedes irte sin dejarme un comentario :)

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