Me reía yo cuando oía aquello de «los terribles 2 años» o para los más internacionales los «terrible two». En serio, pensaba que era una exageración, una sobrevaloración de una etapa de los peques, quizá falta de paciencia por parte de los padres, pero no, no son un mito, son los «terrible two», existen y ya han llegado (que Dios nos pille confesados). He de decir que con Bombón nos saltamos esta etapa, algo que me hizo más incrédula ante la opción de que existiera una etapa tan rebelde a una edad tan temprana. Pero Minibombón… ayyyyy amigos, eso ya es otro cantar.
Mis dos hijos son independientes, con personalidad, simpáticos, cariñosos y por qué no decirlo, también son la mar de guapos, si es que los ves y te dan ganas de llevártelos a casa (pero eso no pasará… son míííííos) y cuando ya estás casi convencida, cuando ya repites el mantra una vez tras otra «pon un Bombón en tu vida» en ese preciso instante ellos cual Gremlin atiborrándose después de las doce de la noche sacan al «bicho» que llevan dentro y rompen esa imagen idílica que mostraban hasta el momento. Aunque de gamberretes también están para comérselos ?
Normalmente se dice que los hermanos pequeños siempre imitan a los mayores y en parte sí es cierto, pero también es cierto que los mayores en ocasiones se dejan llevar por los pequeños… y en esas estamos, MiniBombón lleva a Bombón a su terreno y así pueden hacer piña y ser más fuertes en su rebelión.
Hemos entrado en una fase del «no», con todas sus variables. Tiene un no para cada ocasión.
El «no» y el «no quiero» son los más socorridos, como diría mi abuela «sirven pa’ un roto y pa’ un descosio», yo diría que son sus palabras favoritas.
Que por ejemplo le digo que vamos a dormir, que ya es tarde, ahí va un «no«, que le insisto, pasamos al «no quiero» que me vengo arriba, respiro hondo e insisto, entonces pasamos a un «que he dicho que NO QUI E RO» con su correspondiente subida de tono para remarcar el «no quiero» y la mirada de perdona vidas.
Que estás en el momento sofá y tele y no hay lo que a él le gusta, pues coge el mando te lo trae y te dice «mamá, eto no gusta… dibujos» y yo «no, vamos a pintar» aquí ya viene con refuerzos «no mamá, no gusta y ahora no quiero pintar y a tata tampoco gusta… dibujos poifa» y ahí están los dos en plan suplicante, pero a veces llegamos al cabreo después de 27840 «poifa» con sus correspondientes «no» como respuesta, entonces acaba él la conversación con un «¡no dibujos! ¡no tele! ¡no pintar! ¡no nada!».
Que estoy haciendo la cena y él quiere que vayamos a la habitación a cualquier cosa que le interese y yo en ese momento no puedo «no, para ya mamá y vamos, luego comida».
Es el niño del no y no es lo único que me saca de mis casillas también lo aplica a querer lo que no tiene en ese momento. Por las mañanas lo dejo con su abuela para ir a trabajar, monta la tercera guerra mundial porque se quiere quedar conmigo y cuando voy a recogerlo la monta nuevamente porque se quiere quedar con ella. Cuando voy a bañarlo no quiere y cuando voy a sacarlo tampoco, todo ello con su espectáculo incluido de llantos y berridos.
Es difícil, es una edad difícil, tanto para ellos como para nosotros. Nunca sabes si lo estás haciendo bien, pero de eso se trata ¿no? de crecer juntos y de encontrar ese punto en el que por un lado nosotros como padres aprendemos que realmente tenemos más paciencia de la que creemos y ellos como hijos aprenden a tener su propia personalidad, lo que conlleva a partes iguales sacarnos de nuestras casillas y también engatusarnos con esas preciosas sonrisas, esos besos impagables y esas cositas suyas que por mucho que nos saquen de nuestras casillas nos derriten al instante, porque de lo que no hay duda es que saben como sacarnos una sonrisa en cualquier momento por mucho que la «hayan liado».
Los «Terrible two» son otra fase en ocasiones masoquistamente maravillosa de la infancia, otra fase que debemos disfrutar porque ya sabemos que crecen tan rápido que no nos damos ni cuenta.
¿Vosotros habéis pasado por esta fase? ¿Qué tal la habéis llevado? ¿Algún consejo?
Gracias y feliz día ?
Por aqui también estamos en los «Terrible Two» a la enana le ha dado ahora por decirme que no me deja hacer pipi en el baño. Me cierra la tapa y me dice: «mama tu pipi no». Te puedes imaginar los berrinches que pilla cada vez que me siento en la taza jajjajaja
Jajaja ostras, si es q tienen cada cosa, omo dice mi suegra «son fases» jejeje ya pasará. Saludos y feliz día ?